Son dos los objetivos para trabajar un sistema de gestión de la calidad en nuestra organización. El primer objetivo es obtener productos y servicios conformes. ¿A que nos referimos?, un producto o servicio conformes, es aquel que cumple los requisitos establecidos. ¿Cuáles son esos requisitos? Son los definidos en la organización, los coordinados o solicitados por el cliente y los legales y reglamentarios. Aquí un ejemplo:
El servicio de desratización debe considerar detalles que la organización planifica para su ejecución; tales como, cantidad de personal, marca y dosis del pesticida, equipo apropiado para la labor, entre otros. Además; el cliente pudo solicitar como parte de sus requisitos, el horario para realizar el servicio, documentos del personal para el acceso a sus instalaciones y rutas específicas para el desplazamiento. Así mismo, los productos utilizados para eliminar roedores (rodenticidas), deben estar autorizados por DIGESA, a través de resoluciones directorales.
El segundo objetivo es obtener la satisfacción de los clientes y está relacionado directamente al primer objetivo. Si en el tiempo logramos proporcionar productos y servicios conformes, los clientes estarán satisfechos.
En resumen, un sistema de gestión de la calidad básicamente ordena e integra los procesos de la organización para obtener como salidas esperadas, productos y servicios conformes y por ende la satisfacción de nuestros clientes.